lunes, 21 de febrero de 2011

TORMENTA DEL DESIERTO

20 febrero 2011
Rodábamos tranquilos, protegidos por las altas paredes que forman un bonito desfiladero. Al mismo tiempo nos sentíamos observados. En cualquier momento un grupo de sioux nos asaltarían gritando y con pinturas de guerra; una banda de mexicanos nos tendería una emboscada o el séptimo de caballería aparecería haciendo mucho ruido sin que nadie le hubiera llamado… así es el desierto de Almería.
No nos equivocamos si decimos que esta ruta es una de las más bonitas que se pueden hacer por Almería. El paisaje que se ve desde la carretera se hace aun más grande si estás dentro de él. Y por supuesto aun más bonito.
Teníamos previsto circular por lo que fue un intento de carretera hasta Granada, pero unos perritos hicieron que desecháramos la idea. Directamente a la rambla de Santa Fe.
Sólo somos dos, Kiko y Franci Poblador. Este tramo lo hacemos a un buen ritmo y luchando contra el viento. A nuestro lado la vía del tren nos acompaña fielmente. Unas veces desaparece y otras nos invita a unirnos a ella.

Atentos vamos del gepese que nos guía a las entrañas del desierto. Antes de que aparecieran los sioux, nos topamos con un poblado en ruinas de antiguos trabajadores de RENFE. La Fuentesanta se llama el lugar. Allí, sin bolso de piel marrón, pero con botas de calas y maillot de domingo, nos sentamos en el andén, atentos al primer tren, comiendo un bocadillo.

No esperábamos a nadie, solo pretendíamos conseguir que aquel lugar cobrara un poco de vida, aunque solo fuera un segundo. La vida que no hace mucho seguro que tenía. El segundo que dura el pitido de saludo del tren.
Y aparecieron los indios. ¿¡Dónde está el camino!? Por aquí… por allí. Otra vez el gepese nos aturde. La verdad es que la salida de la estación no está señalizada, jajaja.
Cogemos un camino alternativo, paralelo al real. Justo hacia la emboscada de la banda mexicana. En esos momentos en vez de ser John Wayne en alguna de sus aventuras, parecíamos Fernando Esteso en ‘Al este del Oeste’. No nos quedan muchas alternativas y rápidamente hay que decidir. Tenemos que volver al camino real y es…. POR ALLI.
Si llega a estar Avalos, hubiese empezado a maldecir el día en el que apareció ese aparato y al calimochoman que lo lee. ¡Qué eso es una montaña!.
Kiko se moría de risa y Franci callaba por respeto. Bici al hombro hicimos un tramo que resultaba DIFICIL incluso sin lastre.

Arriba no estaba el camino, pero sí era una zona que permitía ir en bici.
Nunca estuvimos tan seguros de hacer lo incorrecto; allí que no había nada que seguir, ni referencias, caímos en la divertida locura de Bigote Arrocet. Kiko seguía riendo y Franci se rendía y reía. Irremediablemente, perderse es lo cotidiano.
No hizo falta el séptimo de caballería. Como los jinetes del poney expres, saltamos a la ruta marcada y nos lanzamos en un rodar precioso por senderos acantilados, trazadas entre valles, descensos frenéticos y equilibrios rocosos. FANTASTICO.


Dando rienda suelta a nuestras monturas cabalgamos en busca de alguna diligencia que nos llevara de vuelta a casa. Con alegría por lo vivido mirábamos atrás. En el paisaje cada vez más amplio y lejano aun se divisaban los sombreros anchos sobre grandes bigotes y cinturones de balas; las plumas y pinturas de guerra. El viento nos acercaba el sonido de gritos y disparos. Volveremos. Allí que tampoco es la vida real, allí que no es un infierno.
Las puertas de saloon se abrieron ante el empuje de dos forasteros. Tenemos la garganta seca camarero. Sin prisa pero sin pausa un fresco tubo de cerveza se desliza por sus gargantas. PUM, sírvanos otro. Mientas, secamos la boca con la manga del maillot.
Creo que nos hemos metido demasiado en el papel, jajaja.

3 comentarios:

  1. Cuando querais repetimos que me lo he pasado de puta madre.
    Además se me ocurren varias alternativas para hacerlo mas divertido, jajaja.
    Confiad en mi.

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  2. yo en cuanto tenga la mano en condiciones me apunto el primero, perdiendose por supuesto sino no seria una verdadera ruta dondebikera.
    Quiero ir en bici yaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa

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  3. increible macho increible!!!!!!
    q pena q la ruta del eternal running no la hagas tu, seria mucho mas divertida, con todo elmunco perdido por nijar jajajaja

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