lunes, 15 de febrero de 2010

DUATLON

Vera 14 febrero

Otra vez frío, otra vez agua y otra vez sin ruta. Aún no hemos alcanzado el grado de locura mastrinkais como para ir en busca del infierno y sacarle los colores. Ni como cucarachas que se lanzan en busca de acrecentar su leyenda de indomables y se sumergen en la oscuridad del frío y el límite que pueden soportar. Los dondebikers desayunan bien en casa y se alimentan en el calor del hogar esperando mejores momentos para compartir risas y pedaladas.

Pero hubo cóctel de dulce sabor, si. Como comentábamos recientemente, la manera en la que cada uno busca su propio infierno o alcanza su propio límite tiene sabores muy variados, y esta semana el cóctel se servía frío, removido, no agitado... DUATLON.

No aparecen este tipo de pruebas por Almería, ni se dan a conocer, ni se miman e intentan darles aire festivo. Pero agradeciendo la iniciativa, Kiko y Montero van a Vera.

A Montero le encantan este tipo de pruebas. Se subía por las paredes el sábado temiendo que la fiebre y el malestar le impidiesen competir el domingo. Intentaba convencerse de que estaría mejor si dormía bien. Su demonio se llamaba tiritones.

Kiko ha participado en varios de tipo cross (mtb) pero ésta sería su primera experiencia con la flaca. (Gracias Pobla, te debo un par de birras)

Evidentemente sin tradición, la prueba no sería nada popular. Se dieron cita lo mejorcito del running y bike de Almería y localidades murcianas cercanas. Setenta corredores cuando lo normal es encontrarnos con más de cien en la salida (Santa Pola más de 1000). Pero así se aprende. Así te motivas. Así das mas de lo que tienes dentro… así revientas, jajajaja.

Recogida de dorsales y entrada a boxes, esto tiene un sabor excelente. Charlamos, compartimos impresiones, entrenos y a calentar que hace un frío que pela.

Nadie conoce el circuito. Nos comentan que puede ser duro (¿puede?). Un ‘rompepiernas’ en forma de toboganes de asfalto sonreía con nuestro sufrimiento. Y si no quieres sopa, pues cuatro vueltas en bici al mismo circuito. Jodido, esa es la palabra.

La fiebre le daba ese plus de locura a Montero para estar arriba (12º a pie). Kiko cogió la estela de un buen grupo que avanzaba con decisión. Cogemos la bici a la vez que saludamos a familiares que nos animan y empieza una nueva carrera. Cambian las posiciones tan rápido como aparece el cansancio. Te pasan si no coges bien el ritmo de la bici. Las piernas que antes eran aliadas, ahora se sublevan ante el pedal. Es la parte más bonita de la prueba. Cada uno ofreciendo lo mejor que tiene, aprovechando sus cualidades justo en el momento adecuado.

Mención aparte se merecen las transiciones. Siempre ocurre algo que recordar al final. Otra vez, cómo no, el protagonista fue Kiko. Deja la bici y le da un amago de calambre en un gemelo. Estira y tras ponerse las zapatillas sale a correr. La gente le mira sorprendida y un juez le dice ‘llevas el casco puesto’, jajajaaja, ¿dondeibak?

Con una sonrisa tras el esfuerzo vuelve a correr el último sector tan jodido como los anteriores. Los corredores ya van tocados. Muchos amagos de lesión hacen que se dejen llevar. Montero anima a Kiko en la recta de meta. Ya está todo hecho; que cada uno siga su camino, cada uno a su lugar.

Es fascinante ver correr a los primeros clasificados. Que manera de rodar arriba y abajo, en grupo y en solitario. El silbido de las ruedas hechiza al pasar. Aunque sólo sea por admirar a tantos campeones anónimos, merece la pena.

Mientras tanto, el único dondebiker en posesión de la locura total del grupo, desafía a la Sierra de Gador y sus senderos pero esta vez a pie. ¡¡¡Carlitos!!! ¡Te estamos esperando!

2 comentarios:

  1. Buena crónica, si señor. Quizás en otra vida, cuando las lesiones me respeten, intentaré ir a una prueba así

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  2. Los duatlones cross son mucho mas divertidos que los de carrertera. Para los aficionados a la bici y a correr es una combinación perfecta... aunque algunos lo hagamos el doble de mal, ja ja.
    Un saludo.

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