miércoles, 23 de junio de 2010

ALTO DE VELEFIQUE

20 junio 2010
Las evidencias no se pueden ocultar. Aunque por fin luzca el magenta dondebikero, seguimos siendo globeros y nunca dejaremos de aprender sobre la bici y de compañeros bikers. Hoy era un buen día para ello.
Lo reconocemos, no sabemos disimular. Para Caco, Avalos y Poblador era su bautismo en una prueba de MTB y lejos de concentrarse en ultimar detalles de nutrición o de mecánica, en el seno del grupo dondebikero solo se hablaba de una cosa: qué buena está la morena de los dorsales, jaja.
La verdad es que todos teníamos unas ganas enormes. ‘Esto va en serio’, pensaban los debutantes, mientras Kiko les comentaba por donde trascurriría la prueba.

Este mundillo nos ha capturado y se debe dejar la vergüenza a un lado. Ahora nuestras venas arden y necesitamos un poco más.
La subida la conocemos y nos es cuestión de cebarse y malgastar fuerzas. Los máquinas suben que se las pelan, pero Avalos y Caco llevan su ritmo casi chirigotero. Es más, un par de chicas les mojaron la oreja, jaja. Kiko lleva un buen ritmo y Poblador se siente motivado en este pelotón de aventureros.
Arriba, en el avituallamiento obligatorio, Poblador propone esperar, pero Kiko decide seguir adelante.
El tramo de descenso es entre árboles, pista, cortijos y a través del río. Fantástico. Eso si, cuidado con pequeñas pozas de agua que se convierten en piscinas. De cabeza cayeron Kiko y Poblador, jeje.
Y vuelta a coger altura. Y vuelven a quedarse rezagados y esta vez Poblador no piensa esperar. No sabe cual es la medida hasta que todo termina. Llega un momento en que las fuerzas no te dejan decir basta y necesita un poco más.
Por el contrario, Avalos y Caco flaquean poco a poco. La subida por el cortafuegos los machaca y agotados se preparan para el infierno.
Así llamó Avalos a los dos kilómetros de piedras que hay que bajar. La verdad es que es horrible. Cuando acabas te duele todo el cuerpo. Por los rebotes y por las caídas. Aun no tenemos el tranquillo pillado, jeje.

Este tramo nos dejó la risa del día. Caco no se sienta y baja todo el rato de pie. Llega al camino en buen estado y sigue de pie. Coge el asfalto final y AUN DE PIE…. ¡Ha perdido el sillín! Hay que ser bruto.
De uno en uno llegamos a meta. Un nativo del lugar se fija… ¿llegáis tarde?, Ah! Pero llegáis.
Una vez juntos comentamos la jornada y las heridas de guerra. Saludamos a los compañeros en la paella y nos llevamos unos regalillos. No terminó mal el día.
Enganchados al MTB, no lo vamos a negar. Si decimos que nos hemos quitado, no es verdad… las evidencias no se pueden ocultar.

2 comentarios:

  1. Muy bien a todos. Poco a poco se harán mejor las pruebas. Lo importante es divertirse.
    Un saludo.

    ResponderEliminar
  2. Muy bien compañeros, buen relato kiko, precioso final, pero llevo tres dias esperando la cronica, no me hagais sufrir tanto eh???.
    Es un placer pedalear con vosotros desde el sillon de mi casa, jajaja
    un abrazo fieras

    ResponderEliminar